CAMBIOCLIMATICO DESTRUYE LA TIERRA

OBLIGACIONES DEL SER HUMANO EN EL JUDAISMO.
La ley judía comtempla deberes para con Dios, para con los hombres y presenta una alianza de Dios con los patriarcas, en la que Dios ha escogido a aquellos varones para que ellos y sus descendientes difundieran su culto por las naciones con la promesa, de parte de Dios, de una protección perpetua con el compromiso, de parte de ellos, de fidelidad a Dios y a su ley.
Los deberes para con Dios pueden resumirse en dos textos de la Torá:
1. "Amarás al Eterno, Dios tuyo, con todo tu corazón, toda tu alma y todas tus fuerzas".
2. "Sed santos, porque Yo el Eterno, vuestro Dios, soy santo".
De ahí el culto, las leyes de pureza, la circuncisión y las prescripciones relativas a los alimentos.
Los deberes hacia los hombres los resume así un versículo de la Torá: "Amarás a tu prójimo como a ti mismo" y por prójimo hay que entender incluso al extranjero. De donde se siguen las numerosas prescripciones sociales y las referentes a la caridad.
La Torá no es sólo una compilación de preceptos religiosod y morales, sino también una legislación. Por lo tanto, contiene leyes sobre administración de justicia, el trato que se le ha de dar a los siervos, la dirección de la guerra y a otras actividades. La famosa ley del talión "ojo por ojo y diente por diente" no es un precepto moral. La Torá ordena siempre la benignidad, el perdón y condena la venganza y también el principio jurídico para uso exclusivo de los jueces en sus funciones: la obligación de proporcionar la pena al delito.
Los días festivos en el juaísmo son: el sábado, las fiestas de la peregrinación, Pascua, Pentecostes y los Tabernáculos. Cada una perpetúa el recuerdo de un acontecimiento histórico.
Las solemnidades austeras: el día anual y el día de la expiación o Gran Perdón, este último consagrado totalmente a la plegaria y al ayuno. Los sábados y demás días festivos está prohibido trabajar.
Hay también fiestas menores: la de la suertes, aniversario de la liberación de los judíos de Persia, gracias a la reina Ester (siglo IV a de C), y la de la Inauguración que conmemora la purificación del templo de Jerusalén, después de las victorias de Judas Macabeo sobre Lisias, lugarteniente de Antíoco Epífanes (años 165 y 164 a de C).
La religión judía prescribe asi mismo ayunos, en recuerdo de trágicos acontecimientos de la historia hebrea, el mas importante de los cuales es el que se guarda en memoria de la primera y segunda destrucciones deltemplo.
Los sábados y las demás festividades, igual que todos los restantes días del calendario israelita comienzan por la tarde y duran hasta el atardecer del día siguiente.
Para el culto, la liturgia judaica prescribe tres oficios cotidianos para los días laborales, el de la mañana, el del medio día y el de la tarde.
Cada servicio público del culto se concluye con la proclamación de la ezperanza de Israel. Por una parte con la recitación de la plegaria Alenu, en la entra la profecía de Sacarías: "En aquel día el Eterno será uno y su nombre será uno", anuncio de la conversión del género humano al único Dios; por otra parte, con el qaddit, en el que se pide a Dios que apresure el advenimiento de su reino sobre la tierra.
Dios está en todas partes, se le puede sentir, por medio de sus manifestaciones, pero no se lepuede ver.