CAMBIOCLIMATICO DESTRUYE LA TIERRA

IMPERIOS QUE DOMINARON A EGIPTO.
3 El EGIPTO BIZANTINO. años 395 a 642 d C.
Los árabes conquistaron a Egipto, Alejandría declinó su poder en favor de los puertos sirios y las carabanas procedentes del Extremo Oriente empezaron a abastecer a Conatantinopla, antigua Bizancio, hoy Estambul.
El Egipto bizantino fue esencialmente un pueblo cristiano porque el nuevo faraón era el obispo de Alejandría, que en el concilio de Constantinipla, año 381, fue reconocido como patriarca, superior a los demás obispos de oriente y además fue el único de Oriente que conservó el título de Papa, por lo tanto nombraba a los obispos de Egipto, que eran superior o igual a cién, con un clero numeroso e incondicional. Estimuló el espíritu nacional de los egipcios en contra de los griegos. Se convirtió en el dueño de Egipto y aspiraba sumplantar a su rival de Constantinopla.
El patriarca Dióscoro, en el período 444-451, que profesó el monofisismo, naturaleza divina única en Cristo, hizo destituir en el concilio de Efeso. año 449 a Flavio, patriarca de Constantinopla y contradictor del monofisismo, lo cual motivó que el Papa León I, en el concilio de Caicedonia. año 451, destituyera a Dioscoro, decisión que no fue aceptada por Egipto donde el monofisismo se fortaleció. Los efuerzos por atraer a los monofisistas fueron nulos y Egipto se mantuvo en esta creencia nacional. El poder de Alejandría juzgaba que la unidad religiosa era indispensable, las persecuciones fueron numerosas e implacables durante los dos siglos siguientes. Alejandría se sublevó y su patriarca fue asesinado. El monofisismo sacó provecho de las luchas políticas que se adelantaban en Constantinopla y en adelante, año 460, existieron dos tipos de patriarca: el patriarca melquita, de origen real ya que el nombre imperial era desconocido en Oriente, y que siempre estaba amenazado por el furor popular, y el patriarca monofisista o jacobita, porque Dioscoro se llamaba Jacobo antes de su consagración, quién siempre estaba apoyado por la mayoría de los indigenas egipcios. Los monofisistas se dividieron en sectas enemigas, pero todas reprochaban al patriarca jacobita sus preferencias por el poder imperial.
El emperador Heraclio. años 610 a 641, resconquistó sus provincias orientales que estaban en poder de los persas, que ocuparon a Egipto entre los años 617 a 629, se preocupó por restablecer la unidad de creencias, a todo precio. Impuso el bautismo a los judós y a las sectas cristianas rivales la nueva doctrina del monoteísmo, voluntad única en Cristo, que provocaron violentas reacciones, por lo que el odio a los griegos y al poder imperial alacanzaron su máxima intensidad.