A toda la gran erosiòn natural que sufre la Tierra, se suma la que los seres humanos le proporcionan por medio de los procesos de arado para la explotaciòn agrìcola, por una parte, y por las explotaciones de ganaderìa de vacunos, equinos, caprinos u otros. Tambiàn las explotaciones de canteras, para la extracciòn de recbos, arenas, piedras, grvillas y otros materiales para la construcciòn de viviendas, carretras y otras vìas de penetraciòn.
La contaminaciòn de los suelos tambièn contribuye a su desgaste permanente y continuo.Los sitios que escogen para realizar vertimientos de desechos sòlidos, con toda clase de revueltos tanto minerales como orgànicos, se convierten en centros de degradaciòn de los suelos. Allì se producen gases de malos olores, que contaminan el ambiente, y ademàs producen lìquidos llamados lixiviados que se convierten en elementos contaminantes para las fuentes de aguas cercanas.
Los productores de deschos sòlidos, los hogares de todas las ciudades, pequeñas y grandes, deben ser motivados e insentivados, para que en una primera instancia, clasifiquen entre residuos orgànicos y otros. El grupo de los orgànicos es materia prima para la producciòn de gas y abonos. Los dos son productos que tienen una gran demanda, como fuente de energìa y como abonos. El grupo de los otros, en su mayorìa, ya tienen establecidos procesos de reciclaje, casi a escala industrial.
LA REALIDAD ACTUAL ES QUE TODOS LOS SERES VIVOS, EN ESPECIAL LOS SERES HUMANOS, VAN CONTRA EL PLANETA TIERRA Y LO TRANSFORMAN CONSTANTEMENTE.
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