La atmòsfera constituye una gran parte del medio ambiente, cercano a la superficie de la Tierra, y se contamina con los gases que producen los automoviles, los medios de transporte, las industrias y todos los procesos que utilizan combustibles fòciles, derivados del petròleo, del carbon y otros hidrocarburos.
La combustiòn, o quemado, de los diferentes combustibles produce gases como el biòxido de azufre (SO2), el biòxido de nitrògeno (NO2) y adiconalmente, la quema de bosques y maderas que producen el biòxido de carbono (CO2), que en conjunto son causantes de la lluvia àcida, como resultado de la combinaciòn de las aguas lluvias con los gases anteriores, para formar los respectivos àcidos. Que queman los àrboles y la vegetaciòn, adfemàs de formar nubes densas que impiden la penetraciòn de los rayos solares. A estas nubes de gases tòxicos se suman los gases clorofluorcarbonados (CFC) que provienen de los procesos de refrigeraciòn, tanto domèsticos como industriales, para contribuir al empobrecimiento de la capa de OZONO, rompiendo el equilibrio natural que existe entre el oxìgeno y el ozono.
La capa de OZONO, en la zona antàrtica se està debelitando, a tal punto que se ha creado un hueco en esa parte de la capa atmosfèrica, por donde penetran rayos solares que causan daños a los seres vivos.
A lo anterior tambièn se suma el gas metano (CH4), que con los anteriores gases forman una capa nociva, alrededor de la Tierra, que no permite que parte del calor producido por los rayos solares, durante las doce horas de luz de cada dìa, llegue a la atmòsfera porque es atrapado por esos gases. Ademàs son responsables del fenòmeno llamado efecto INVERNADERO, que contribuye al calentamiento de la TIERRA. Efecto que conduce al CALENTAMIENTO GLOBAL y al CAMBIO CLIMATICO.
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